Algunas reflexiones sobre el artículo que hemos leído en El Mundo:
Correcto, la Constitución habla del derecho a vivienda digna. Y a un trabajo digno.
Perfecto, lo raro sería que una Constitución dijera lo que muchas veces es una realidad:
"los habitantes de este país se tendrán que buscar la vida como puedan para ver si encuentran un trabajo que les permita vivir dignamente no menos de 40 años seguidos, que es lo que le vamos a obligar en cotizaciones para poder acceder a una jubilación mínima" o, por ejemplo, "tendrán derecho a comprar o alquilar una vivienda al precio que le imponga el mercado".
La Banca debería hacérselo mirar un poco, también. En esta última y larga crisis todos nos hemos adaptado a lo que nos viene: sobrevivir como podamos. Pero, los créditos para comprar vivienda sólo se concederán a aquellos que demuestren tener un trabajo fijo y con perspectivas de mantenerlo 40 años después. ¿Ese cliente tipo existe?, pues me gustaría conocerlo. No, nada, para charlar un poco, nada más.
Es decir, en los próximos diez años no quedará más remedio que revisar el modelo de negocio bancario (no creáis, ya hace años que lo llevan haciendo con las comisiones) y adaptarse al modelo "emprendedor" que existirá entonces, a falta de empleo fijo bien remunerado.
Y no olvidemos la ley de la oferta y la demanda...los precios no pueden ir siempre hacia arriba sin límite y los salarios hacia abajo sin remedio...
O nos adaptamos todos o, al final, el desastre. Cordura y sentido común, por favor.
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