Wednesday, October 10, 2012


La Responsabilidad Social Empresarial como valor fundamental de la empresa del siglo XXI

INTRODUCCIÓN

Consideramos la definición de “empresa” (acción, compañía, negocio, proyecto,...) como aquel “conjunto de recursos tecnológicos, financieros y humanos suficientemente organizados y coordinados para la consecución de un objetivo” o bien aquella “unidad económica dotada de capital en la que un grupo de personas trabajan, de forma ordenada y jerarquizada, en la producción o transformación de bienes o en la organización de servicios”.

La base fundamental de toda empresa es la IDEA, el objetivo que se pretende conseguir o el bien social que se pretende satisfacer, ya sea proporcionando mejores productos o mejores servicios al grupo de clientes o consumidores al que nos dirigimos. Pero, para hacer realidad esa idea, es necesario definir lo que llamamos Política empresarial, a modo de declaración de principios, donde se exprese la voluntad de servicio hacia la comunidad.

En el sector de la Formación sabemos que, para redactar buenos contenidos, tenemos que definir un Objetivo general, para continuar con Objetivos específicos y acabar con Objetivos operativos. Podríamos hacer un símil en el ámbito empresarial, si equiparamos:

  • Política empresarial = Objetivo general
  • Planificación estratégica = Objetivos específicos
  • Manual de procedimientos = Objetivos operativos

Definir claramente el objetivo ideal, hacia donde queremos dirigir nuestro proyecto, resulta básico para seguir estructurando cada una de las fases de desarrollo del mismo. Por tanto, el primer paso consistirá en definir nuestra Política General de Empresa, en la que se describirán objetivos, planteamientos y VALORES que marcarán el sello de identidad de nuestra actuación. Es ahí donde habrá que hacer mención a la Responsabilidad Social Empresarial que queremos sea el factor diferenciador de nuestra empresa ante nuestros competidores.

Podemos definir la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) como la “declaración voluntaria realizada por la empresa acerca de sus principios éticos y socialmente responsables ante la sociedad, el medio ambiente y el entorno de trabajo”.

BENEFICIOS DE LA IMPLANTACIÓN

La puesta en marcha y seguimiento de un Plan de RSE reportará los siguientes beneficios, a corto plazo:

  • Mejora de la productividad global
  • Mayor satisfacción del cliente
  • Mejora de la imagen externa de la organización
  • Ajuste de costes y gastos generales
  • Respeto al medio natural

ORIENTACIÓN DE LAS ACTIVIDADES DE RSE:

CLIENTE INTERNO: Reconocimiento del desempeño, Conciliación vida familiar, Igualdad de oportunidades, Transparencia, Comunicación fluida, Accidentalidad cero, Trabajo en equipo.

CLIENTE EXTERNO: Productos y Servicios de calidad a buen precio, Encuestas de satisfacción al cliente, Selección de proveedores y pagos sin demora, Sinergias positivas entre competidores.

MEDIO AMBIENTE: Respeto al entorno natural, Identificación y Control de materias primas, Energía de transformación utilizada y Control de residuos producidos.

SOCIEDAD EN GENERAL: Patrocinios deportivos y saludables, Mejora de la imagen general de la empresa, Colaboración con organismos nacionales e internacionales no gubernamentales.


RENDIMIENTO/IMPACTO DE LA RSE

Con respecto a la implantación y seguimiento de la RSE, lo mejor de todo es que no supone inversión alguna para la empresa. Es decir, simplemente con el deseo y voluntad de la Dirección de poner en marcha este sistema de gestión es suficiente para comprobar la eficacia del mismo y su traducción, a medio plazo, en beneficios tangibles.

Según un estudio de Adecco, en los últimos 5 años se ha duplicado el índice de absentismo laboral en nuestro país. La causa principal: la insatisfacción laboral. Aproximadamente cifrada en un 50% del total del incremento que se ha producido.

Si conseguimos tener una plantilla feliz, que conozca sus objetivos, que sea reconocido su trabajo, que se implique en los valores de la empresa, comprobaremos cómo desciende el número de horas perdidas por incapacidad transitoria y aumenta progresivamente la productividad de la empresa. Inversión: CERO, Retorno: Infinito.

Animo desde estas líneas a emprender Planes de RSE en toda Pyme que quiera destacar en el conglomerado empresarial tan competitivo como tenemos en nuestros días. Nuestra salud nos lo agradecerá.